Creado el 10 de junio de 1976 por medio del Decreto N°556 del Ministerio de Educación, en concordancia con lo indicado en la Ley Nº 17.288. Comprende 2.662 hectáreas de superficie, abarcando toda la península ubicada en la comuna de Hualpén, Provincia de Concepción.
El Santuario fue creado con el objetivo de resguardar tanto su patrimonio natural -asociado al relicto de bosque nativo y al entorno biogeográfico costero/fluvial- como su patrimonio cultural -caracterizado por la presencia de sitios arqueológicos, históricos y formas de vida tradicionales-.
Al interior del Santuario, en un sector adyacente a la desembocadura del Río Biobío, se encuentran el Parque y Museo Pedro del Río Zañartu el cual ocupa una superficie de 552 hectáreas. El conjunto fue declarado Monumento Nacional con el objetivo de salvaguardar un valioso patrimonio natural y cultural entregado en herencia a la ciudad de Concepción a principios del siglo XX. Por otra parte, considerando que la península posee una alta concentración de biodiversidad, se ha propuesto la creación de un Área Marina Costera Protegida de Múltiples Usos colindante al borde costero del Santuario, con una extensión de 2.700 hectáreas.
Importancia ambiental del Santuario de la Naturaleza, Península de Hualpén
La península de Hualpén se inscribe en una zona climática de transición entre los climas templado mediterráneo cálido y templado húmedo. Esta característica, junto a su configuración geográfica, explica la presencia de una alta concentración de biodiversidad, determinada por la presencia de elementos endémicos y relictuales resultantes de su aislamiento biogeográfico. Por otra parte, la península se estructura en dos zonas ambientalmente complementarias; la primera abarca a los terrenos altos, formados por mesetas y cerros; la segunda incluye a diversas formaciones litorales compuestas por playas, acantilados, llanuras de inundación del río Biobío y el estero Lenga, plataformas rocosas y fondos marinos. Estos elementos naturales originan diversos ecosistemas y hábitats debido a la integración de los ambientes terrestres y marinos.
Desde la perspectiva ecológica, la península de Hualpén se destaca por la existencia de sitios de nidificación y alimentación de aves, residentes y migratorias, muchas de las cuales presentan serios problemas de conservación tales como pingüinos de Humboldt (Spheniscus humboldti ), cisne de cuello negro (Cygnus melancoryphus ) y otras aves asociadas al estuario y marisma de Lenga. Además, en el área costera adyacente existen registros de cetáceos y otros mamíferos marinos fuertemente amenazados tales como ballena azul (Balaenoptora musculus ), ballena sei (Balaenoptera borealis ) y chungungo (Lontra felina ). La presencia de cetáceos fomentó el desarrollo de una industria ballenera en el sector de Chome e influyóen la ocupación histórica de la península.
En relación con los ecosistemas terrestres, la península de Hualpén se distingue por la presencia de un bosque costero original dominado por especies nativas de peumo, olivillo, litre y boldo junto con especies menos abundantes como canelo, ulmo y laurel. Otra característica interesante es la subsistencia de queule y pitao, dos especies arbóreas en peligro de extinción.
Valor patrimonial del Santuario de la Naturaleza, Península de Hualpén
En el sector sur interior del Santuario se ubican la casa patronal y el parque del fundo Hualpén, declarados Monumento Nacional en la categoría de Monumentos Histórico mediante el Decreto Nº 556 del 10 de Junio de 1976, que también incluye la creación del Santuario de la Naturaleza Península de Hualpén.
El parque y la casona patronal (actual Museo Pedro del Río Zañartu) se incorporaron al conjunto de bienes protegidos del Estado con la finalidad de proteger a las construcciones, al parque y a las colecciones de objetos reunidos por Pedro del Río Zañartu en sus viajes por el mundo.
En el Santuario de la Naturaleza Península de Hualpén también hay recursos culturales que están relacionados con el proceso histórico de ocupación de la península; en este sentido se destacan los asentamientos costeros que tradicionalmente se han sustentado de los recursos marinos y pesca artesanal como las caletas de Lenga, Chome y Perone. Los restos de la antigua planta ballenera en el sector de Chome y el faro de Punta Hualpén son otros recursos culturales que hacen referencia a la acción del hombre en el territorio costero. Además, hay viviendas tradicionales, como la casa patronal del fundo Hualpén y la vivienda con galería del fundo Santa Eloísa.
El valor patrimonial del Santuario también se relaciona con el hallazgo de evidencias arqueológicas de ocupación prehistórica desde el período pre-cerámico en el sector Perone y de conchales en la costa de Ramuntcho, Rocoto, Chome y Lenga.
Relevancia territorial del Santuario de la Naturaleza, Península de Hualpén
La península de Hualpén es parte del Área Metropolitana de Concepción y desde la perspectiva territorial se destaca por sus condiciones de alta naturalidad. Próxima a zonas urbanizadas y a uno de los principales enclaves productivos de la región y se encuentra a 20 minutos del centro de Concepción; sin embargo, a pesar de esta cercanía, conserva sus particularidades ambientales y un conjunto de bienes patrimoniales representativos del proceso de ocupación del territorio costero.
El Santuario de la Naturaleza Península de Hualpén es una extensa área verde rural, con 2.662 hectáreas de superficie, equivalentes al 50% del territorio comunal de Hualpén y al área urbana de Concepción. El aporte de la península de Hualpén al sistema de áreas verdes del Área Metropolitana es relevante si se considera la escasez de áreas verdes urbanas; por esta razón, en junto con la Reserva Nacional Nonguén y la Península de Tumbes cumple la función de pulmones verdes que contribuyen decisivamente a la calidad de vida urbana.
Fuente: Guía Santuario de la Naturaleza Península de Hualpén, Fondo Protección Ambiental (FPA), Seremi Medio Ambiente Bío-Bío. 2016.